¿Cuál es la relación de
la historia local con la cultura
local?
local?
La historia de San Bernardo parece ser aún un libro en blanco. Para
cualquier sanbernardino interesado en conocer más sobre su ciudad, resulta
problemático encontrar datos detallados o profundidad en el relato local, a
pesar de lo que muchos creen.
Para estudiantes o personas interesadas en la cultura
local, conocer la historia de la ciudad es una necesidad vital, ya que toda
obra artística o práctica cultural, que quiera abordar nuestra identidad, debe
recurrir a documentarse del trabajo de los historiadores.
Pero sobre largos periodos históricos, sabemos muy poco o nada, o la
información es parcial o insuficiente. Se repite una y otra vez. Las nuevas
generaciones comienzan a preguntarse, como llenar estos vacíos y quien debería
hacerlo.
HISTORIA Y CULTURA
Existe un innegable déficit de investigación histórica. Hemos carecido
de suficientes historiadores, y nuestros cronistas autodidactas han sido también muy pocos y al parecer salieron poco de sus barrios, sobretodo hacia los extramuros de la ciudad. Sus visiones no alcanzan a dar cuenta de los cambios de décadas recientes.
En la relación de la historia local con la cultura, se ha instalado la idea de que las iniciativas culturales y la creación artística deben exclusivamente estar al servicio de interpretar y difundir esa historia oficial.
Esto ha contribuido a imaginar una identidad cultural homogénea, con nuevas
creaciones artísticas que siguen un molde sin muchas posibilidades y con tradiciones
más amoldadas aún, que año a año pierden su esencia social.
Se ha vuelto normal tener políticas públicas, destinadas a repetir las
mismas imágenes, las mismas momias y casonas fantasmas. Mientras pareciera que
la labor de los gestores es solo hacer homenajes, y la de los artistas es solo reproducir
santos patronos, imágenes sagradas, canciones repetidas, no crear a partir de
ellas, ni menos reinterpretarlas o cuestionarlas.
SAN BERNARDO EN TEXTOS HISTÓRICOS O CRÓNICAS RECIENTES
Pero concentrémonos en los historiadores y cronistas. Primero
desechemos la idea de que no se ha hecho nada.
Existe una real preocupación de registrar la historia de la ciudad, y no
es algo tan reciente como se cree. Solo en los últimos años encontramos varios textos
que abordan relatos históricos.
Algunos de ellos son: La Revista Homenaje al aniversario 175 de San
Bernardo (Municipalidad de San
Bernardo, 1973), con bastante información desconocida. Luego: Acuarelas
de ayer y de hoy, Crónicas de San Bernardo de Mario Arroyo Vicuña (1975).
En los años 90 encontramos el ya conocido libro Historia de la ciudad de San Bernardo de Raúl
Besoaín (C. Cultural San Bernardo, 1993. Segunda edición en 1995).
Y
más tarde: Crónicas de
sanbernardinos, de Guillermo Ríos Challe (1999), o San Bernardo en la memoria de su
gente (C. Cultural San Bernardo, 2008). En la década 2000 tenemos el
libro de fotografías y crónicas Imágenes en contrapunto, de Cesar
Disi (2008).
Estos textos, sumados a innumerables artículos, dossiers, folletos, textos
sin editar y archivos, constituyen la bibliografía de la historia sanbernardina.
La mayoría responde a un gran afecto por San Bernardo y no son textos
académicos, ni escritos por historiadores de formación universitaria. Aquello no
les resta el mérito de ser los primeros
textos de esta época que asumen esa inmensa tarea.
Sus autores, son profesores, o autodidactas de otras profesiones u
oficios que recurren al relato de vecinos.
Pero la información disponible es insuficiente, pensando en todo lo
que podríamos saber o analizar sobre la comuna,
¿Existen hoy investigaciones
con métodos provenientes de las artes o de las ciencias sociales?, ¿Existen hoy
investigaciones no académicas que puedan ser abordadas desde la historia local,
la educación popular u otras metodologías adaptadas al sujeto popular?, ¿Alguien
esta trabajando una historia más amplia, más abierta a toda la diversidad
social de la historia de San Bernardo?’. ¿Alguien esta escribiendo una historia
sin sesgos tan evidentes y más cercana a todos?
Si existe, es necesario saber, cuanto de estas miradas amplias tiene
que ver con el relato de la mayoritaria población de estrato popular de la
ciudad. O si abordan al ignorado sujeto campesino. O si solo se enfocan a la
historia de una clase media y clase obrera especializada, de la industria
ferroviaria. O bien, en general a una mirada patrimonialista de la historia, y
por rebote, de la cultura.
El CENTRO DE ESTUDIOS LOCALES CEL: UNA AGRUPACIÓN QUE ABORDA LA HISTORIA COMUNAL
“El desafío es que nuestros jóvenes
estudiantes de historia se queden acá, busquen entre sus antepasados su
historia y construyamos un relato local y social, la épica de nuestras
familias. “
Entrevista al historiador sanbernardino Marcelino Romero
Cárdenas.
En el 2012, sorpresivamente surge un grupo que se hará cargo de
interpretar archivos, hasta ahora desconocidos: El Centro de estudios locales CEL, dedicado a estudiar metódicamente
la historia de la ciudad, hace su debut en las Jornadas de historia local 2012 y 2013, organizadas por el entonces
recién creado Archivo Municipal de San Bernardo, dependiente del gobierno
comunal.
El CEL se plantea desde lo académico, desde la labor profesional del
historiador. Desde allí propone escudriñar en una historia local más diversa,
más social.
Entrevistamos a uno de sus integrantes y fundadores, el historiador Marcelino
Romero Cárdenas, quien nos explica desde donde se instala este centro y nos da
pistas sobre hacia dónde va su labor.
http://centroestudioslocales.blogspot.cl/
Cosecha Local: ¿De que se trata el Centro de Estudios Locales y cuál
fue la motivación principal al crearlo?
El Centro de Estudios Locales es
el encuentro de cuatro investigadores, de distintas universidades, y que no
tenían nada más en común que el lugar donde viven. De ahí parte el CEL, de la necesidad
de conocer jóvenes profesionales con una misma inquietud y que puedan trabajar
y aportar para esta comuna con el oficio que han aprendido, haciendo hincapié
en la profesionalidad y calidad de los resultados. Nos motiva el hecho de abrir
un camino para que seamos capaces nosotros mismos de ver nuestro pasado,
revisarlo e historiarlo en cuanto ir dejando los medios para el estudio futuro
de nuestra historia, repito, desde un punto de vista académico y profesional.
Cosecha Local: La jornadas de
historia local, ha sido un hito crucial en los últimos años, respecto a lo
realizado sobre la historia de San
Bernardo y su relación con identidad y cultura. Pero entiendo que no tuvo otras
versiones ¿Por qué?, ¿Qué paso con esas personas? ¿Hay un interés tuyo o de
ellos en seguir realizando investigaciones sobre la ciudad y si es así, cuales
son los obstáculos para hacerlo?
MARCELINO ROMERO: Bueno,
el encuentro de historia local parte como una inquietud del archivo histórico
comunal y de su administrador, Gabriel Salazar Soto, encuentro al cual - en
principio - fuimos invitados individualmente y donde, con el paso del tiempo,
vimos la necesidad de presentarnos como conjunto antes que como individuos.
Mi sensación personal es que no
se ha vuelto a repetir la experiencia debido a la falta de prolijidad e interés
en la institución municipal para avalar, comprometerse y organizar estos
eventos, lo que dificulta la tarea en general.
En todo caso, como CEL seguimos
insistiendo en la necesidad de generar nuestra propia lectura de nuestra
historia, por ello nos seguimos reuniendo y hemos llegado a un acuerdo con la
Casa de la Cultura para la publicación de un libro con artículos relativos a la
historia de San Bernardo, el cual esperamos llegué a buen puerto.
Es difícil realizar este trabajo
en San Bernardo. Si ya la situación de la cultura en la comuna es compleja,
debido a la falta de apoyo y recursos, para la Historia, con menor masividad
que actividades como el teatro o la danza, es altamente dificultosa. Se debe luchar
contra la falta de interés y desidia en el trato.
Cosecha Local: Es innegable que existe una mirada de la
historia centralista y solo basada en ciertos símbolos tradicionalistas. ¿De
que manera concreta crees tú, se podría
trabajar una historiografía de las periferias, o bien de otras miradas menos
oficialistas de San Bernardo ¿Existe material que investigar?, ¿Hay algo en
esta poblaciones surgidas desde fines de
los 70 que pudiera revertir o al menos equilibrar esta visión de un centro
histórico como único patrón de identidad?
MARCELINO ROMERO: Sin
duda hay mucho que estudiar y hacer, hay mucho por investigar y escribir. Lo
que pasa es que se hizo el esfuerzo una vez a principio de los noventa, el
libro de Raúl Besoaín, que sin desmerecer el crédito de ser el primer y único
libro que intenta relatar nuestra historia local, se queda demasiado corto. Pero
nos hemos conformado, la autoridad y los habitantes del centro se han
conformado con aquello, ¿por qué?, porque finalmente habla de ellos mismos, de su
historia, su épica, de los apellidos antiguos del San Bernardo tradicionalista
aristocrático, al San Bernardo aristocrático obrero. Es un libro sumamente
pesimista y nostálgico, y deja fuera a toda esa masa de personas que llegaron
en los 60, 70 y 80 a habitar la periferia, se les discrimina y se les anula su
historia. Se les mete en la cabeza que su memoria es la misma que la de la
familia Cuevas, Amengual o Navarro y ahí se genera el choque.
Yo creo que por ahí va el
desafío, que nuestros jóvenes estudiantes de historia no salgan a contar lo que
sucedió solo en Santiago, a pesar del inmenso valor que hay en esas
iniciativas, sino que se queden acá, busquen entre sus antepasados su historia
y construyamos un relato local y social, la épica de nuestras familias.
Cosecha Local: Es común oír
a estos “antiguos sanbernardinos”, afirmar que la ciudad “se vino abajo” con la
llegada de las poblaciones en los 80…Entendiendo que se refieren a que la vida
de pueblo semi rural y tranquilo habría sido devastada por esta sobrepoblación
y por el “tipo de gente” que llegó. ¿Hasta donde considerarías que esa
afirmación se sustenta históricamente? Es decir, ¿Si tuvieras que reafirmar o
rebatir como historiador esa versión, con que datos la justificarías?
MARCELINO ROMERO: Como
nos dijo la historiadora Carmen Norambuena en las segundas jornadas de Historia
local, la ciudad de San Bernardo no es mejor ni peor, es solo distinta. Yo en
lo personal me identifico mucho con esa frase, de la situación actual el único
culpable que podría haber, somos nosotros los sanbernardinos. Porque somos los
llamados a construir esta ciudad, entonces ella es el reflejo de nuestro
abandono. Nuestras autoridades se casan con la historia nostálgica, no solo
porque es un buen nicho de votos, sino porque además no supone un esfuerzo
mayor, se miran el ombligo y se quedan con ese parámetro para medir lo que
sucede en todo el territorio comunal.
San Bernardo es una ciudad que ha
sido empujada una y otra vez hacía el crecimiento demográfico. Ya sea desde su
primera fundación, la llegada de la maestranza, o el advenimiento de las
poblaciones en los 70 y 80; cada uno de los “antiguos habitantes” ha visto al
nuevo grupo como elemento atentatorio contra su imagen de ciudad. Finalmente se han mezclado y han vuelto a
repetir el ciclo con los recién llegados (podría estarnos sucediendo ahora con
la llegada de inmigrantes de color).
En resumen, el discurso nostálgico
del pasado esplendoroso, no es más que un constructo imaginario, fruto del
rebase generacional, que no conjuga con las nuevas formas, ideas y tipos.
Cosecha Local: ¿Cuáles, a tu juicio serían las políticas o acciones en
cultura que debería hacer un nuevo gobierno municipal que reemplace al actual?
M.ROMERO: Bueno, mi alcance es más bien general si hablamos de cultura como un todo. Partiendo desde ahí creo que una sala de teatro le vendría muy bien a muchos compañeros que no cuentan con un espacio hecho especialmente para ello; más cercano a eso me parece que la autoridad debería comprometerse más con el patrimonio comunal, dar la lucha junto a los vecinos en defensa de espacios de memoria importantes como la Maestranza, el teatro Municipal, el Pucará de Chena. Generar circuitos patrimoniales en torno a barrios emblemáticos y trabajar en los hitos patrimoniales que se han generado después de la década del 70, cruzando la vía férrea, para vincular el patrimonio antiguo con la memoria de las nuevas poblaciones, y escribir acerca de nuevas historias, más diversas, que hablen del sujeto popular, de delincuencia (desde el s XIX), de prostitución, salud, religiosidad, etc…
Cosecha Local: Considerando los altos índices de vulnerabilidad que
existen en San Bernardo y que puede ser verdad que la gente de la periferia no
se identifica, ni le interesa el patrimonio, ¿Cómo debería actuar un historiador
local frente a eso ¿ De que puede hablarles, ¿Que puede enseñar en una escuela
municipal, que no sea solo algo del
tipo:“ Aquí estuvo la casona de don Eusebio Guruguchaga, construida en 1901…”
M.ROMERO: Creo que el relato para llevar a la periferia, es hacer
una línea que vaya desde la fundación hasta nuestros días por la vía del relato
de lo que sucede al mundo popular. Estudiar la problemática del bajo pueblo y
observar como esa vertiente llega hasta nosotros.
Y por último que sepan que
patrimonio no es solo lo que hace la fachada de un edificio sino que son
aquellos elementos que generan en un grupo una identificación común, un
elemento que ha ganado valor por lo que significa para un grupo de personas y
que puede ir más allá de un edificio, a una población, a un muro, una calle, un
árbol, etc.
Cosecha Local Es una investigación profunda y
detallada sobre la cultura y las artes
en la provincia de Maipo (Buin, Calera de Tango, Paine y San Bernardo),
dividida entre las décadas de los 80, 90 y 2000.
Investigamos,
analizamos y clasificamos:
PRÁCTICAS,
ENTIDADES, LUGARES, NOMBRES y PROCESOS de la cultura local en épocas recientes.
Agradecemos
tus aportes y colaboración con este proyecto.
Cada uno de
tus datos u opiniones son un aporte para la cultura local